Ojo con la vista

La vista es un gran privilegio que no todos gozamos, pero que la mayoría disfruta y da por sentado. El avance de la tecnología móvil hace que cada vez estemos más pendientes de las pantallas, ya sea para los mensajes de amigos, ver notas y publicaciones interesantes o entusiasmarnos con juegos como cuando estamos por acertar el premio grande en la ruleta en línea. En esta nota, dales una mirada a algunos consejos para cuidar de tus ojos y tu vista.
1. Cuidado general de la visión
Estos son algunos cuidados en general que pueden ayudarte a mantener sanos a tus ojos:
- Comer saludable: las verduras de hojas, cítricos, nueces, huevos y pescados como atún y salmón son ricos en nutrientes como omega-3, zinc, luteína y vitaminas C y E, que ayudan a combatir la degeneración macular y las cataratas.
- Dejar de fumar: no hace falta decir más. Incontables beneficios por dejar e innumerables desventajas por tener el hábito.
- Utilizar gafas de seguridad o anteojos de sol, según corresponda: las primeras ayudan a proteger los ojos de contacto con agentes externos; los segundos, de los rayos ultravioleta.
- Consultar a un médico periódicamente: los exámenes oculares ayudan a prevenir y tratar problemas relacionados con la salud ocular.
- Evitar ver mucho tiempo las pantallas de computadoras o dispositivos móviles: vista cansada, visión borrosa, problemas de enfoque y dolores de cabeza, cuello y espalda son algunas de las consecuencias. A continuación, te indicamos consejos para prevenir esto.
2. Consejos para el uso de la vista con pantallas
Aquí hay algunos consejos para evitar problemas de la visión y proteger tus ojos:
- Utilizá anteojos o lentes de contacto con la graduación correcta. Si sentís fatiga ocular constantemente, consultá con un médico: quizá necesites anteojos de descanso. Estos suelen tener una cobertura antirreflectiva que minimiza la cantidad de luz que entra en los lentes.
- Adecuá la ergonomía para la comodidad de tu vista. Asegurate que la pantalla esté a nivel con tus ojos, y elegí asientos cómodos y con apoyo. La postura es muy importante para evitar problemas musculares. Mantené una distancia saludable respecto de la pantalla; de 50 a 60 centímetros es adecuado. El centro de la pantalla debería estar unos 15 grados debajo de tus ojos.
- Utilizá iluminación adecuada. Evitá el reflejo de las ventanas y las luces. Podés colocar pantallas antirreflejo en las computadoras y tabletas. Y evitá el exceso de luz para no forzar la vista, reduciendo el uso de luces fluorescentes, utilizando cortinas o bajando la intensidad de la iluminación artificial.
- Mejorá tu tecnología de visualización: las pantallas planas de LED con superficies antirreflectivas son lo más adecuado, con un tamaño de pantalla de 19 pulgadas en adelante. A mayor resolución, mayor nitidez.
- Ajustá la visualización en dispositivos: el brillo, lo más cercano al del entorno; el tamaño de fuente y contraste, para una lectura cómoda. Letras negras sobre fondo blanco suele ser lo mejor para textos largos.
- Descansá la vista cada 20 minutos. Mirá 6 metros hacia lo lejos durante 20 segundos. O levantate cada 2 horas y tomate un descanso de 15 minutos. Salir a caminar y observar los objetos a las distintas distancias también ayuda.
- Parpadeá más seguido si sentís sequedad en los ojos. Si hace falta, el colirio puede ayudarte a lubricarlos.
- Hacé un uso eficiente de la tecnología a tu alcance. Tanto en la PC como en los dispositivos móviles, usá las opciones de zoom y acercamiento disponibles, regulá el brillo de la pantalla, o agrandá la fuente si tenés problemas para leer.
- Cuidá tu salud general ocular evitando el viento, ambientes secos y tóxicos, y descansando lo suficiente. Durante las horas de sueño, los ojos se lubrican y limpian sustancias irritantes como polvo, humo y alérgenos.
- Ejercitá tus ojos. Practicar distintos ejercicios de vista colabora con la reducción de la fatiga ocular y de enfoque.
3. Los mejores ejercicios para la vista
Empalmado: frotá las palmas de tus manos hasta que se calienten, y posalas sobre tus párpados. El calor ayuda a relajar los músculos oculares. Repetir dos o tres veces.
Parpadeo: sentarse cómodamente con los ojos abiertos y parpadear muy rápido, de 10 a 15 veces. Cerrar los ojos y relajar durante 20 segundos. Repetir 4 o 5 veces.
Acercamiento: Sentado en una silla, estirar el brazo con el pulgar hacia arriba. Doblar gradualmente el brazo y acercarlo a los ojos. Esto permitirá que los ojos se enfoquen y acerquen al pulgar.
Desplazamiento: mover o rotar los ojos de una dirección a otra, sentidos opuestos. Esto activará más los músculos y hará circular la sangre.
Masaje ocular: cerrar los ojos y realizar masajes suaves con los pulgares en la zona desde los párpados hasta las cejas.