9 carreras de animales que no imaginabas

Las apuestas deportivas en un casino online abarcan deportes populares como el fútbol o el básquet, pero hay muchas otras competencias poco conocidas. A continuación te presentamos una lista que pretende iluminar algunos deportes extraños relacionados con animales, así como otros más clásicos.
1. Carrera de caballos
La primera de la lista es la clásica carrera de caballos, también conocida como "turf", donde el público puede apostar por el caballo ganador. Fueron muy importantes en la antigua Grecia y en el Imperio romano, cayeron en el olvido en la Edad Media, hasta que los ingleses las rescataron para transformarlas en lo que conocemos hoy: hipódromos donde jockeys profesionales montan caballos en carreras que se financian con las apuestas del público.
2. Carrera de galgos
En esta competencia, los perros persiguen una liebre mecánica que corre por un carril electrificado. El deporte surgió en Estados Unidos en la década de 1920, pero tuvo especial crecimiento después de la Segunda Guerra Mundial. La aceptación de las carreras de galgos es desigual en el mundo. Mientras en algunos países, como Argentina, están prohibidas desde 2016, en Andalucía, España, es legal que los perros persigan liebres reales.
3. Carrera de palomas
¿Mike Tyson y la reina Isabel II viendo juntos una carrera de palomas? Bueno, podría pasar, ya que estos dos personajes tan disímiles comparten esa pasión. Se trata de liberar palomas mensajeras entrenadas y cronometrar cuánto tardan en recorrer una distancia determinada. Si bien en Estados Unidos se registraron carreras de hasta 1800 kilómetros, este deporte es popular también en Asia, donde se apuestan millones de dólares, y en Bélgica y Sudáfrica, entre otros países. En Argentina se calcula que hay casi 3000 criadores.
4. Carrera de búfalos
Para festejar el fin del Monzón y, en consecuencia, el comienzo de las cosechas, en la provincia tailandesa de Chonburi organizan carreras de búfalos de agua. Los entrenadores compran búfalos jóvenes a agricultores locales, a los que crían para correr por una pista de 200 metros. Pueden llegar a gastar unos 1500 dólares en la compra, pero es como jugar al casino online: si apuestan a un búfalo ganador, multiplicarán varias veces su valor.
5. Carrera de camellos
Popular en Arabia Saudita y en Australia, tiene muchas similitudes con las carreras de caballos, solo que los camellos pueden mantener una velocidad promedio de 40 kilómetros durante una hora entera, hasta el sprint final en el que aceleran a 65 kilómetros por hora. ¿Y cómo aguantan ese ritmo los jinetes? Bueno, un detalle muy interesante es que no son humanos sino robots con una fusta y un GPS que transmite pulsaciones del camello y velocidad. En este caso, el deporte está reservado a jeques, capaces de solventar los elevados costos de la tecnología.
6. Carrera de caracoles
En julio de cada año, en Reino Unido se celebra el mundial de carreras de caracoles. Lejos de criaderos y fortunas para el entrenamiento, las estrellas de la competencia vienen de las zonas húmedas del jardín. Quien quiera participar llevará a su campeón con un distintivo pegado al caparazón, para poder identificarlo. Los caracoles arrancan desde el centro de una mesa hacia el exterior, en un intento de superar el récord mundial de 2 minutos establecido por el caracol Archie en 1995.
7. Carrera de hámsters
Las carreras de hámsters concentran apuestas en Reino Unido y llegaron a ser transmitidas por la BBC y MTV. Los animales corren por la clásica rueda y, con su impulso, mueven vehículos especialmente diseñados. El récord para cruzar los 9 metros de longitud de la pista es de 38 segundos.
8. Carrera de tortugas
Populares en Estados Unidos, las carreras de tortugas se parecen a las de caracoles: colocan a los animales en el centro de un círculo, y gana la tortuga que traspase primero los límites de la circunferencia. En 1974, la campeona consiguió recorrer 7,6 metros en tan solo 39 segundos.
9. Carrera de avestruces
Popular en algunos países africanos como Sudáfrica, donde ofrecen a los turistas montar una, las carreras de avestruces son un hecho cotidiano en estados como Minesota, en Estados Unidos, a tal punto que pueden juntar hasta 100 000 espectadores. La pista es muy parecida a la de caballos, con jockeys que montan las avestruces, solo que por las características del animal y su velocidad (¡casi 70 kilómetros por hora!), muchas veces terminan mordiendo el polvo.